El renting de coches es un acuerdo mediante el cual adquieres un vehículo pagando una cuota mensual por un tiempo determinado y al final tiene carácter devolutivo. A nivel contable se le conoce como arriendo operativo donde incluye los gastos de mantenimiento, seguro a todo riesgo, pago de impuestos, cambio de neumáticos y muchos otros servicios más.
Al adquirir un contrato de este tipo, es vital tener conocimiento de las implicaciones financieras, legales y contables. De tal modo que podamos asumir los compromisos adquiridos, tener control de los gastos mensuales y en especial: cómo se maneja tu contabilidad personal o empresarial.
¿Qué es la contabilización de un renting?
Para reflejar la adquisición del vehículo en tus balances, si eres el arrendatario solo tienes que asumirlo como un gasto; mientras que el arrendador que es el dueño del vehículo lo clasifica como un activo amortizable. Todo va depender de la figura del contrato y además del tipo de arrendamiento, ya que, el impacto de renting y leasing en la contabilidad son muy distintos.
¿Cómo contabilizar un renting de coches?
El renting a nivel contable no es más que un gasto, ya que no hay características de opción a compra entre las partes involucradas y por consiguiente al final termina siendo un arriendo.
Por tal razón, a nivel contable se crean tres asientos para reflejar el renting o el contrato operativo. Luego se hará los cálculos respectivos entre el “Debe” y el “Haber”, finalmente se podrá mostrar la contabilidad del renting.
Contabilizar renting de un coche y la factura
Son muy pocos los contratos que exigen fianza en la actualidad; no obstante, puede presentarse el caso en que las cláusulas lo estipulan. La fianza es un dinero que se le da al arrendador por adelantado, con la finalidad de cubrir posibles daños al vehículo; mientras perdure el contrato del renting. A nivel contable se puede reflejar en la cuenta 260 que corresponde a “fianzas de largo plazo”.
Cuando recibes la factura por tu servicio contratado de renting, la misma deberá reflejarse de la siguiente manera:
- 621 llamado “arrendamientos y cánones”, donde el concepto del mismo será: contabilización de gastos por alquileres y en la columna “Debe” el gasto XXX generado por ello.
- 472 conocido como “IVA”, se mantiene bajo el mismo concepto del primer asiento, variando el coste del impuesto en la columna “Debe”.
- 410 donde se refleja “Acreedores por prestación de servicios”, con la misma figura del concepto, solo que ahora el coste XXX se refleja en el “Haber”.
De esta manera se refleja la contabilidad del renting, tanto para coches como otros bienes, donde cumplan las características del contrato entre 2 a 5 años.
El plan General Contable
El Plan General Contable es una normativa donde recopila todos los principios y prácticas contables de nuestro país y a su vez se encarga de regular al sector empresarial. Con este marco regulatorio el contrato del renting debe ser reflejado en las prácticas contables donde: el arrendador lo demuestra como un ingreso; por otra parte, será un gasto al tratarse del arrendatario, siendo un reflejo del estado de ganancias y pérdidas.
El arrendador debe amortizar su flota cedida en alquiler en el balance contable. Además, asumir la depreciación de los coches que tenga consigo o en renting, donde el pago recibido por este concepto tiene que llevarlo al estado de ganancias y pérdidas.
¿Cómo contabilizar renting de maquinaria?
El primer paso cuando una entidad adquiere una maquinaria bajo el renting es determinar la finalidad de uso, ya que de ello dependerá como se llevará el proceso contable.
Toda empresa por ahorro de costes emplea el renting para la adquisición de diversos equipos. Además, obtener algunos beneficios fiscales; debido a que este no será un activo amortizable y en consecuencia solo pasa a representar gastos a nivel contable. El contrato operativo debe tener una duración mínima de 24 meses y una máxima de 5 años.
Contabilizar el renting para maquinaria es muy similar al renting de coches, se hace los 3 asientos que corresponden: al de los impuestos, la cuenta contable por concepto de arrendamiento y el pago de la fracción mensual por el servicio de renting. Para este caso tanto el arrendador como arrendatario debe reflejar el balance contable en el estado de ganancias y pérdidas.
Diferencia entre leasing y renting en contabilidad
Al tomar la decisión de contratar el leasing y el renting es vital conocer de que tratan cada uno, el primero se trata de un contrato financiero; mientras que el segundo es un contrato operativo. Esto es importante a tener en cuenta, ya que a nivel contable tienen distintos manejos, de ahí las siguientes diferencias:
- El renting te ofrece un contrato sin opción a compra.
- La duración de un acuerdo por el leasing puede durar hasta 10 años, mientras que en el renting su tope es de 5 años.
- Las cuotas a pagar por el renting incluyen el servicio de mantenimiento del coche en su totalidad, incluyendo el seguro a todo riesgo. Por su parte con el leasing, el arrendatario asume los costes que genera el vehículo.
- El renting trae consigo beneficios fiscales al tratarse como un gasto de arriendo y en consecuencia no es amortizable el vehículo adquirido.
- Cuando se concluye el contrato del renting, se puede hacer la renovación del acuerdo, cambiar el renting de coche u ofrecer su compra cambiando la modalidad del contrato al leasing.
El valor residual hace referencia al valor del coche después que el mismo ha sido usado por un tiempo determinado. Para las empresas que maneja flotas es un dato de importancia, ya que esto determina el coste de un coche al concluir el renting con el arrendatario.
Esta información contable sirve para calcular los montos de amortización y a su vez al iniciar el renting permite determinar la fracción de pago mensual por el coche y el valor final al concluir el contrato operativo. De esta manera, tanto el arrendatario como arrendador, tienen reflejado en su contabilidad empresarial y/o personal el valor del coche adquirido o rentado.
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