¿Por qué suena el volante a baja velocidad?
Detectar ruidos al girar el volante puede parecer algo menor, pero en realidad puede estar indicando fallos mecánicos importantes. A menudo, los sonidos extraños provienen de la dirección asistida, la suspensión o incluso del roce de los neumáticos. Identificar el origen es clave para actuar a tiempo y evitar daños mayores.
Motivos habituales del ruido al girar el volante
- Falta de lubricación
- Desgaste de rótulas o cojinetes
- Nivel bajo del líquido de dirección
- Problemas en la suspensión
- Tensiones en la cremallera de dirección
Un leve chirrido o crujido al girar el volante no siempre es casual: puede ser el primer síntoma de una avería en desarrollo. Escuchar estos sonidos y actuar a tiempo puede evitarte reparaciones costosas y garantizar tu seguridad al volante. No lo ignores, tu coche siempre da señales.
Cuando giras hacia la izquierda
Si al girar hacia la izquierda escuchas un ruido, es muy probable que el problema se encuentre en los componentes de ese lado del vehículo. Partes como el amortiguador, la rótula axial o incluso los silentblocks pueden estar desgastados y generar fricción o juego excesivo.
Este tipo de fallos puede derivar en una pérdida de estabilidad, especialmente en curvas. Una revisión oportuna permitirá corregir el problema antes de que afecte al comportamiento general del coche o derive en una reparación más costosa.
Cuando giras hacia la derecha
Cuando el ruido se produce al girar hacia la derecha, podría tratarse de un problema relacionado con el sistema de dirección asistida. Las causas pueden incluir una presión desigual, una fuga de líquido hidráulico o un fallo en la bomba de asistencia.
Estos síntomas no deben pasarse por alto, ya que afectan directamente a la maniobrabilidad del coche. Además del ruido, pueden presentarse dureza en el volante o vibraciones, lo cual requiere una intervención técnica para evitar que el daño se extienda a otras piezas.
Causas por las que vibra el volante a baja velocidad
Causas frecuentes
Neumáticos mal equilibrados
Frenos desalineados
Llantas deformadas
Presión desigual en las ruedas
Componentes de dirección desgastados
Consecuencias
Mayor desgaste de neumáticos
Riesgo de fallo mecánico
Incomodidad al conducir
Inestabilidad del vehículo
Mayor gasto en reparaciones
Consejos para evitar ruidos y vibraciones
Revisa y sustituye componentes desgastados
Elementos como rótulas, silentblocks o cojinetes deben mantenerse en buen estado para evitar ruidos.
Evita girar el volante con el coche parado
Esta práctica puede forzar la dirección asistida y generar tensiones innecesarias.
Mantén el nivel adecuado del líquido de dirección asistida
Un líquido por debajo del nivel mínimo puede causar sonidos y pérdida de eficacia al girar.
Acude a revisiones periódicas
Una revisión técnica puede detectar pequeños fallos antes de que se conviertan en problemas mayores.
Equilibra y alinea las ruedas
Un equilibrado y alineado correcto mejora la conducción y evita vibraciones.
Escucha tu coche
Los sonidos inusuales son señales de advertencia: si escuchas algo diferente, actúa.
Ruido “clack clack” al girar el volante en parado
Cuando el coche está parado y al girar el volante se escucha un sonido tipo “clack clack”, suele deberse a juntas homocinéticas desgastadas, topes de suspensión secos o incluso piezas sueltas en la columna de dirección. No lo dejes pasar: podría derivar en una avería más seria.
Un pequeño ruido al girar el volante puede parecer inofensivo, pero en muchos casos es el primer aviso de una avería mecánica que está comenzando a manifestarse. Estos sonidos no deben pasarse por alto, ya que identificar y solucionar el problema a tiempo puede evitarte averías más costosas, mejorar tu seguridad al conducir y alargar la vida útil del vehículo. Escúchalo con atención, no lo ignores